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Fe que une corazones
— “Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican.” — Salmos 127:1 (RVR1960)
Reflexión
La verdadera fortaleza familiar no proviene de los logros materiales ni del esfuerzo humano, sino de una fe compartida en Dios. Cuando cada miembro del hogar reconoce que el Señor es el centro, la unidad se vuelve más fuerte, incluso en los momentos de prueba.
Aplicación
Hoy, dedica un momento para orar juntos como familia. No importa si las palabras son simples; lo que cuenta es el corazón unido que busca al Señor.
Oración
Señor, sé Tú el centro de nuestra familia. Enséñanos a confiar en Ti, a edificar nuestro hogar sobre tu amor y a mantenernos unidos en la fe. Amén.
